Leer proviene de la palabra latina legere, cuyo significado es el de escoger, elegir o seleccionar, incluso el de preferir, optar o decidirse por. Lectocracia es una oda al ejercicio y la práctica de la lectura como fundamento del espÃritu crÃtico, del pensamiento capaz de trascender las convicciones más larvadas, las certidumbres más escondidas, todo aquello que aceptamos irreflexivamente como un a priori incontestable y que es tan difÃcil de reconocer como tal precisamente porque duerme agazapado entre nuestras evidencias más irreflexivas.